martes, 5 de enero de 2010

Balance de mi año flamenco. Parte 2

Este año 2009 que acabamos de despedir ha sido el de la demostración patente de lo que atomizado y desunido que está el mundo de las promociones y celebraciones flamencas.

No hay manera de unir fuerzas para proyectar y programar una gran cita académica con el objeto de celebrar los múltiples centenarios que se cumplían en un mismo año, y aportar estudios y tesis nuevas y renovadoras en la investigación flamenca.

Cada ciudad y cada institución andaluza ha decidido organizar su propio homenaje a los grandes cantaores flamencos que hubieran cumplido 100 años. Como "juan palomo", yo me lo guiso y yo me lo como.

Ha habido, a lo largo del año, múltiples congresos dedicados a los centenarios -o a otros temas "locales"-, simposios, homenajes, jornadas, reuniones..., dedicados, ora a Antonio Mairena, ora a Manolo Caracol, y hasta alguno que incluyó a los dos junto al olvidado Antonio El Sevillano, eso sí: juntos pero no revueltos... en días separados, porque Antonio y Manolo, Manolo y Antonio son como el agua y el aceite.

Total pa' na'. Nadie recordará al año 2009 como el de la Gran Celebración del Cante Flamenco, a los cien años del nacimiento de estos enormes cantaores flamencos, tan determinantes para todo lo que vino después.

Por lo mismo, igual tiene más éxito que este año 2010 celebremos el Centenario de las primeras grabaciones fonográficas de Juan Breva, de la Niña de los Peines, del Niño Medina... [Lamento que esta idea no se me haya ocurrido a mí, sino al Niño de La Macarena]









1 comentario:

Óskar dijo...

ya sé que esto no viene a cuento, pero después de mi crisis/descanso navideño, te deseo flamenca mia una "feliz no navidad" (ya sabes como soy). Un beso muuuuuuy grande.

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